Paradigmas de la eficiencia energética

Consideraciones al Invertir en Start-Ups
Nómadas Contemporáneos: Trabajo y Tecnología

La eficiencia energética (EE) la podemos definir como la obtención de los mismos bienes o servicios con el menor gasto de energía y el menor impacto ambiental. Se trata de utilizar nuevas tecnologías y optimizar los procesos. Existen diferentes formas de medir la EE, dependiendo del nivel, de la tecnología utilizada, del tipo de transporte, del tipo de inmuebles. Lo que hay que considerar es que lo que se haga a nivel individual repercute en el colectivo y lo que se haga en el colectivo tiene igualmente incidencia en lo individual.

Conscientes de la importancia que tiene la energía dentro de diversos ámbitos para el desarrollo de los distintos quehaceres que se realizan día a día en pos de una mejor calidad de vida para la humanidad, las empresas consultoras en el área de Gestión de Eficiencia Energética (GEE) o empresas de servicios energéticos (ESE) han conceptualizado y elaborado un conjunto de instrumentos y actividades que conforman lo que ha denominado Servicios Integrales de Eficiencia Energética (SIEETM).

La misma busca proveer a sus clientes de herramientas y metodologías que les permitan ahorros en lo que pagan por sus consumos energéticos. La Metodología de GEE ayuda a comprender como se utiliza la energía en los hogares, en las empresas, en las instituciones, públicas o privadas, prestadores de servicios, donde un ahorro en la factura energética implica mayor disponibilidad de recursos para mejorar la atención y los servicios a sus clientes. A escala internacional, se estaría cumpliendo con lo establecido en el Protocolo de Kioto, en materia de conservación del ambiente mundial.

Estos ahorros se conseguirán a partir de la implantación de medidas de mejora de la EE y ahorro de los consumos de energía, así como a la utilización de fuentes de energía renovable. De esta forma, para un cliente, la ESE consigue optimizar la gestión e instalación energética, a la vez que reduce el riesgo ante variaciones de los precios de la energía, recuperando las inversiones a través de los ahorros energéticos conseguidos en el mediano y largo plazo. El pago de los servicios prestados a una ESE se basará en la obtención de mejoras de la EE y en el cumplimiento de los demás requisitos de rendimiento convenidos.

Los servicios suministrados por una ESE son de una amplia variedad, y su ámbito de actuación abarcan desde servicios que lucen de lógica común, como es el control de la temperatura de un edificio, hasta otras medidas más complejas y tecnológicas que requieran una mayor inversión, como la instalación de una fuente de energía renovable propia.

El protocolo de actuación que comprenden los tipos de servicios energéticos que desarrolla una ESE es: 1) la auditoría energética; 2) diseño de proyecto; 3) construcción e instalación; 4) explotación; 5) operación y mantenimiento; y 6) control, medición y verificación. Todos estos servicios que ofrecen la ESE pueden ser independientes entre sí o desarrollarse de forma conjunta y complementaria. Es precisamente una de las ventajas del servicio suministrado por ella, el cual permite al cliente disponer de un único interlocutor y externalizar todos los servicios requeridos en una única organización.
El alcance de los servicios de una ESE se adapta a las necesidades del cliente en cada caso. Aquellas empresas con gran experiencia en materia energética, una ESE podrá simplemente desarrollar la construcción e instalación de un proyecto específico, o únicamente desarrollar la explotación de un proyecto anteriormente instalado.

El acuerdo de servicio entre el cliente y la ESE se establece a través de un contrato de servicios energéticos y mantenimiento integral de las instalaciones de consumo energético entre ambas partes, acordando las condiciones técnicas y económicas en que se realizarán los mismos. Se trata de una tipo de contrato relativamente nuevo en el mercado de la gestión energética para ciertos países en desarrollo pero con muchos años de uso en países industrializados.

La ESE cuenta con personal de amplia experiencia en competencias relacionadas con la GEE, pudiéndose limitarse solamente en transmitir conocimientos y experiencias para el uso racional y eficiente de la energía a nivel doméstico, comercial e industrial, creando conciencia sobre el tema a través de charlas y las redes sociales.

En el manejo técnico, la ESE se encuentra integrado, principalmente, por el Programa de GEE que comprende un conjunto de actividades ordenadas secuencialmente en el tiempo, y que deben ser implementadas por los responsables de la ejecución del programa, lo que implica la integración de recursos humanos, materiales, tecnología y de los recursos financieros necesarios que lograrán llevar a cabo y con éxito el plan o política de la GEE. Las actividades a realizar van desde la sensibilización del personal de la institución dónde se aplicará el PGEE, el diagnóstico, la elaboración del informe final con las recomendaciones del caso hasta el asesoramiento complementario para las acciones a acometer a corto plazo.

La GEE se hace imprescindible en aquellas instituciones, públicas o privadas, prestadoras de servicios (alcaldías, universidades, hoteles, hospitales, oficinas, centros comerciales, etc.) para lograr un ahorro en la factura energética. La GEE ayuda a comprender mejor cómo se utiliza la energía en la empresa y cómo controlar sus costos, identificando las áreas en las cuales presentan mal uso de energía y en dónde es posible realizar mejoras de EE o los denominados Proyectos de Uso Racional de la Energía.

Algunos países cuyos servicios energéticos son fuertemente subsidiados están revirtiendo progresivamente dichos subsidios por un lado para aliviar de dichas las cargas financieras al Estado y por el otro para sensibilizar vía precio en el consumidor final la importancia de hacer un uso racional de los recursos energéticos fósiles y no renovables lo cual contribuye con el medio ambiente.

Moises Bittán
@moisesbittan
Director de Finantop