Escenario económico para el 2011

Venezuela y la crisis climática
Venezuela 2012: fisionomía económica y otras anotaciones.

El Mundo

Por Moisés Bittán

El escenario actual venezolano está en un momento difícil donde nos encontramos con una caída significativa de la producción nacional de bienes y servicios, con una inflación casi del 27%. Venezuela exhibe una de las mayores tasas de inflación de la región, la cual se mantendrá durante 2011 de acuerdo con el Presupuesto Nacional, que prevé un crecimiento de los precios de entre 23 y 25 por ciento el próximo año (cifras del sector oficial). Paralelamente a esto, las políticas llevadas adelante por el ejecutivo de intervenir y expropiar empresas ha estado causando gran desconcierto a la inversión privada en el país, de todo tipo, generando paralización de proyectos e inversiones que beneficiarían la producción ya tan decaída y aumentaría las posibilidades de mayor empleo formal y estabilidad económica del sistema.

No obstante, en los últimos años se ha presentado una baja de calidad y de servicios tanto en el sector público como en el privado, así como una oferta de productos bastante disminuida y, en algunos casos, inexistente y hasta especulativa en extremo.

La pobreza puede ser que haya disminuido en términos relativos, pero en términos absolutos, continua en ascenso y cada día más, tenemos más población que requerirá de condiciones socioeconómicas mejores y con calidad de vida mejorada.

El gobierno ha duplicado su nómina en una década, lo cual nos indica que no es la burocracia lo que impide el desarrollo, sino es la falta de desarrollo lo que crea la burocracia.

Finalmente, para terminar ésta situación que estuvimos viviendo en el 2010, el empobrecimiento general de toda la población es evidente, sumándole, la deficiente y carente oferta de servicios públicos, la colapsada salud pública, la educación totalmente desnivelada y nuestro potencial humano poco competitivo con respecto a otras economías de América Latina y el mundo.

Perspectivas

Visto éste cuadro anterior, de continuar las políticas macroeconómicas vigentes, tendremos éste posible escenario para el 2011:

  • Mayor caída de la producción de bienes y servicios en todo el país.
  • Devaluación de nuestra moneda, por no poderse mantener con varios tipos de cambio, establecidos por el mismo gobierno. Ya es oficial la unificación cambiaria a 4,30 por Cadivi y se mantendrá el cambio flotante por el Sitme. Le dará al gobierno más bolívares para financiar su presupuesto nacional deficitario. Esta medida de devaluar nuestra moneda no es nuevo en Venezuela, ya que se practicó durante la cuarta República.
  • Persistencia de fuga de capitales a toda costa y que el gobierno auspicia con la venta de bonos gubernamentales. (que no es otra cosa que mayor deuda para la República).
  • Pérdida del poder adquisitivo del venezolano entre el 40% y 50%.
  • Caída más significativa de la producción petrolera y pérdida de mercados ya conquistados que están siendo tomados por otros países competidores, inclusive, miembros de la misma OPEP donde Venezuela es socio; situación grave porque disminuirían los ingresos nacionales en divisas que representan casi la totalidad de todas las partidas de ingreso del presupuesto nacional.
  • Caída de los ingresos fiscales por concepto de impuestos de todo tipo, por cierre permanente de empresas y la disminución, aún más pronunciada, del consumo global de la población venezolana.
  • Descomposición social global de los integrantes de nuestra sociedad venezolana.
  • Más pobreza y necesidades que satisfacer.
  • Escala preocupante de inseguridad personal más cruenta y despiadada
  • Manifestaciones y brotes sociales ascendentes en todo el territorio
  • Más burocracia estatal y posible aumento de corrupción generalizada en toda la economía.
  • Merma drástica de las reservas internacionales que nos pondrán en condiciones de insolvencia a nivel internacional.
  • Balanza de pagos muy negativa, que al no poder solventar esta situación, tendríamos que recurrir a un organismo internacional para asistencia técnica y de financiamiento: el FMI, haciendo necesario tomar medidas económicas desagradables para la población, para lograr cambiar de rumbo con un plan económico de apertura y libre de un control de cambios.

Posibles soluciones como medicina preventiva

  • Importante y fundamental: conciliación de todos los sectores: gobierno con el privado y demás sectores, para marcar un plan de crecimiento, cooperación y desarrollo de corto, mediano y largo alcance.
  • Crear las condiciones necesarias para las inversiones de capital de todo tipo (local y extranjero).
  • Disminuir las regulaciones y restricciones a la producción de bienes y servicios.
  • Crearse en forma mancomunada (gobierno y el resto de la economía) la filosofía de la responsabilidad estatal, por un lado, y social, por parte de las empresas, para coadyuvar las necesidades de los más desfavorecidos de nuestra sociedad.
  • Aquellas empresas que no son estratégicas para el Estado Venezolano deben ser privatizadas.
  • Destinar los fondos públicos en sanear y mejorar la salud pública, la educación, la infraestructura de la nación y la seguridad personal y pública.
  • Reactivar los tratados económicos, sociales, políticos y culturales con el mayor número de países de América Latina, Norteamérica, Centroamérica, Europa, Asia, África y Oceanía.
  • Reducir, paulatinamente, la deuda pública internacional que, según voceros oficiales, se ubica más allá de 150 mil millones de dólares. Al igual que la deuda pública interna.

Poner en marcha una política cambiaria y monetaria sensata que elimine progresivamente  el  control  de  cambio,  permita  la flotación  transparente  de  la  moneda  a  una  tasa  de equilibrio  cónsona  con  la  competitividad,  bajo  control independiente del BCV, con una serie de medidas previas dirigidas a la conciliación nacional y el aumento de la confianza, de tal manera frenar la salida de todas las divisas del País.