El Mundo

Por Moisés Bittán

Hemos tomado muy en cuenta el desarrollo económico que ha tenido Corea del Sur, razón de la cual Venezuela ha establecido un acercamiento a través de serie de convenios que favorecen mutuamente a ambos, como lo es la exportación de petróleo y el acercamiento diplomático.

Realizamos exportaciones no tradicionales con alguna significación a Corea del Sur siendo nuestra participación mayor al 15%, y se prevé que sigan aumentando con el tiempo. Corea del Sur ocupa el segundo lugar de las importaciones venezolanas provenientes de los países asiáticos. Cabe destacar que las importaciones realizadas actualmente por nuestro país, en cuanto a electrodomésticos y línea blanca se refieren, provienen casi en su totalidad de Corea del Sur, motivo por el cual debe resaltarse la importancia y el nivel que han alcanzado estos países en sus relaciones comerciales.

Su fortaleza está representada básicamente por la tecnología de avanzada, facilitando sus procesos productivos y ofreciendo personal calificado necesario para operar dicha tecnología; brindando también al mundo una extensa gama de productos de buena calidad y a precios muy razonables con los cuales es difícil de competir. Nuestra fortaleza está representada en los grandes yacimientos de petróleo y minerales que son necesarios como materia prima para el desarrollo de la industria y el comercio con el país asiático.

COREA DEL SUR Y SU DESARROLLO ECONÓMICO

Corea del Sur, país moderno, avanzado y evolucionado, que perfectamente puede hacer sombra a cualquier estado occidental del mundo, mantiene una economía muy avanzada y puede competir a escala global con muchos países. Su economía es la cuarta más grande en Asia y la 13ª más grande en el mundo.

Su capacidad para exportar tecnología moderna de calidad es indiscutible, así como su capacidad para importar todo aquello que necesite para mantener su evolución, teniendo en cuenta su gran solvencia y equilibrio en su saldo comercial. Tras superar recientemente la crisis asiática, Corea del Sur está de nuevo entre los países más competitivos del mundo, no teniendo desequilibrios en su economía ni una fuerte dependencia de otros países.

En las últimas décadas su riqueza se ha distribuido equitativamente entre los surcoreanos, creando una población eficiente y competitiva. Además de índices macroeconómicos, la población coreana está muy avanzada y desarrollada, destacándose entre otras: el elevado nivel educación, su índice de desarrollo humano, sanidad, etc. En Corea del Sur no sucede como en algunos países latinoamericanos poseedores de grandes riquezas, cuyo bienestar no llega a todos sus ciudadanos.

Tiene un mercado interior en auge y un nivel de vida en su población muy elevado. No tiene riquezas primarias (casi no tiene agricultura) y tiene necesidad de muchas materias primas esenciales (gas, petróleo, etc), para satisfacer su mercado interior y su fuerte industria, necesita importar en grandes cantidades. Pero Corea del Sur tiene una gran solvencia para hacer frente a estas importaciones, ya que dicho país exporta materiales industriales modernos, de calidad y competitivos.

Tras superar las inestabilidades sociales y políticas de anteriores décadas, Corea del Sur ha entrado en el nuevo siglo con fuerte pie. Es uno de los líderes tanto en Asia como en el foro APEC ( de sus siglas en inglés Asia-Pacific Economic Cooperation). De hecho, ese país es cada vez uno de los aliados más importantes para países latinoamericanos a través de APEC. Igualmente cabe destacar la importancia de pertenecer al G20 y presidirla actualmente. Nuestros países latinoamericanos necesitan de Corea del Sur para recoger inversiones, un país en crecimiento con pequeñas dimensiones que necesita de nuevos mercados para hacer tangible ese crecimiento con mano de obra barata.

Hoy en día, este país ha dejado de ser un país dependiente de ayudas e inversiones del extranjero (sobre todo EEUU y Japón) a ser un país que crea dependencia en el extranjero. Las empresas coreanas se internacionalizan por todos los continentes, como son el ejemplo de Hyundai, Samsung, etc. Gran parte de estas empresas son conglomerados económicos conocidos como chaebol y son los que han liderado la economía del país.

Corea del Sur es el ejemplo a seguir de muchos países asiáticos o latinoamericanos en vías de desarrollo. Si hasta hace 50 años era un país rural y pobre, hoy en día es un país no sólo con una economía ejemplar, sino cuya población goza en su conjunto de un bienestar social envidiable.

COREA DEL SUR Y LOS TIGRES ASIÁTICOS

Singapur, Hong Kong, Taiwán y Corea del Sur, siendo este último país el más grande del grupo, han propiciado políticas económicas, administrativas y gubernamentales que han cambiado paradigmas mundiales, en razón de que han llegado a casi todos los confines del orbe con sus productos, basados en un proceso industrial a menor costo para el público y con calidad, dentro de un contexto de productividad.

Los gobiernos y las empresas transnacionales de estos países asiáticos son ejemplos de una manera eficaz desde el punto de vista empresarial. Obviamente existen desavenencias y crisis en el marco de su avance, sin embargo tratan de mantenerse en la hegemonía mundial, haciendo frente a las potencias de Occidente. La economía que tiene sus bases en la productividad y en la reingeniería, ha calado hondo en los mercados internacionales.

Creo firmemente que el camino a la paz con Corea del Norte transitará en mediano plazo por las sendas de la cooperación económica los cuales crearan en las próximas décadas el marco propicio para la reunificación de ambos territorios tan anhelado por muchos de sus ciudadanos.