LA OPEP: De regulador del mercado crudos a pontenciador de regímenes democráticos

EL PARLAMENTO LATINOAMERICANO: Un foro para el avance de la integración de nuestros pueblos.
DEMOCRACIA: Comercio exterior e Inversiones extranjeras

El Mundo

Por Moisés Bittán

EL PETROLEO COMO PRINCIPAL FUENTE DE RECURSO ENERGÉTICO

Es un recurso natural no renovable que aporta el mayor porcentaje del total de la energía que se consume en el mundo. La importancia del petróleo no ha dejado de crecer desde sus primeras aplicaciones industriales a mediados del siglo XIX, y ha sido el responsable de conflictos bélicos en algunas partes del mundo (Oriente Medio).  La alta dependencia que el mundo tiene del petróleo, la inestabilidad que caracteriza al mercado internacional y las fluctuaciones de los precios de este producto, han llevado a que se investiguen energías alternativas, aunque hasta ahora no se ha logrado una opción que realmente lo sustituya.

LA OPEP

Consciente de las imperfecciones en el mercado trazados por algunas transnacionales durante muchos años y considerando el petróleo como un producto agotable y hasta los momentos sin una opción clara sobre su sustitución, nacería la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en 1960, con sede en Viena, teniendo como origen de su creación las reuniones celebradas en Bagdad, entre los países árabes productores y exportadores mas Venezuela, con la idea de agruparse y establecer una política común a la hora de fijar un precio y unas cuotas de producción para el petróleo. Desde hace tiempo la OPEP controla aproximadamente dos tercios de la exportación mundial de petróleo.

Aunque en sus comienzos no tuvo la fuerza suficiente para hacer frente a la política de las multinacionales, a partir de 1971 la OPEP decidió nacionalizar las empresas de explotación situadas en su territorio, y en 1973. A partir de entonces, la OPEP ocupó el primer plano de la actividad económica mundial, porque sus decisiones iniciaron importantes subidas en los precios en materia de precios afectan directamente a las economías occidentales. Hoy en día la OPEP la integran 12 miembros: Angola, Argelia, Ecuador, Irak, Irán, Kuwait, Nigeria, Qatar, Arabia Saudí, Libia, Emiratos Árabes Unidos y Venezuela.

EL FONDO OPEP

Es una institución intergubernamental de financiamiento para el desarrollo establecida en enero de 1976 por los miembros que entonces integraban la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP). Promueve la cooperación entre sus países miembros y otros países en desarrollo, como expresión de solidaridad Sur-Sur. En particular, apoya el progreso económico y social de los países de bajos ingresos.

El Fondo OPEP adopta un enfoque integrado y participativo del desarrollo y hace hincapié en actividades que permitan mejorar directamente las condiciones de vida de las personas más pobres del mundo. La mayor parte de sus trabajos se llevan a cabo en zonas rurales, e incluyen iniciativas que no se limitan al sector de la agricultura, sino que además abarcan los sectores de salud, abastecimiento de agua y saneamiento, educación, energía, transporte, telecomunicaciones, industria y desarrollo de la empresa privada. Ha forjado sólidas alianzas con los países con los que coopera, y trabaja con ellos para abordar cuestiones de máxima necesidad.

Todos los países en desarrollo pueden recibir asistencia del Fondo, con excepción de los Estados Miembros del Fondo OPEP. Desde el comienzo de sus trabajos, en 1976, el Fondo OPEP ha comprometido más de US$ 7.600 millones para financiar actividades de desarrollo, incluidos US$ 6.300 millones en préstamos destinados a más de 1.000 programas y proyectos. Hasta el presente, cerca de 125 países de África, Asia, América Latina, el Caribe, el Medio Oriente y Europa se han beneficiado de sus mecanismos de financiamiento.

ALIANZA Y TRABAJO EN CONJUNTO CON EL FONDO INTERNACIONAL DE DESARROLLO AGRÍCOLA

Creado para responder a la crisis alimentaria mundial que a mediados del decenio de 1970 asolaba numerosos países en desarrollo, el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola -FIDA-, (como organismo especializado del sistema de las Naciones Unidas), representa un reconocimiento, por parte de la comunidad internacional, de la necesidad de forjar una alianza mundial con el objetivo común de erradicar la pobreza y el hambre. El establecimiento del Fondo OPEP fue un importante gesto de solidaridad de los Estados Miembros de la OPEP para con el mundo en desarrollo.

La creación de ambas instituciones en el mismo período refleja el amplio reconocimiento de que las alianzas son esenciales para abordar los problemas mundiales urgentes.

La labor de ambos organismos es esencial para el logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. Aproximadamente el 75% de las personas más pobres del mundo viven en zonas rurales y dependen de la agricultura y las actividades conexas para su subsistencia. Para alcanzar las metas de reducir a la mitad, para 2015, el porcentaje de personas que viven en la extrema pobreza y padecen hambre, la agricultura y el desarrollo rural deberán ocupar un lugar primordial en los esfuerzos de desarrollo.

La OPEP en cincuenta años, ciertamente ha facilitado la generación de riqueza y la distribución del ingreso a escala planetaria, empero, sus países miembros deben hacer un ejercicio reflexivo para que este progreso económico sirva para el avance y la consolidación de libertades civiles especialmente en cada uno de sus países donde aún la relación entre bienestar económico y los derechos políticos dista considerablemente. Los venezolanos es ese sentido debemos jugar un rol más activo por conducto de este organismo internacional, pues otra forma de cultivar la riqueza petrolera es generando mecanismos de afianzamiento de la democracia en lo interno y en aquellos países donde tenemos intereses.