Algunas consideraciones económicas entre China y Venezuela
IV Cumbre del grupo 20, Impacto en América Latina y los objetivos del milenio
El Mundo
Por Moisés Bittán
COYUNTURA POLÍTICA
El gobierno de Taiwán, desde la toma de posesión de su presidente a partir del 2008, y en concordancia con el Partido Nacionalista Kuomintang (KMT), se ha caracterizado por establecer el esfuerzo de un acercamiento a la República Popular China (China Continental) con el objeto de garantizar la paz en el estrecho y reactivar la economía de la isla. En contraposición, una parte importante de la población de la isla se ha mostrado contraria a un acercamiento a la China Continental. El presidente de la isla ha tenido (y tiene) una difícil decisión por delante, pues en temas de tanta trascendencia no puede, o no debe actuar ignorando a una buena parte de la población que cuestionan estos temas. De momento, ha querido dejar bien claro que su política de: 1º.- no a la reunificación; 2º.- no a la independencia; 3º.- no al uso de la fuerza en el Estrecho, sigue vigente y son la base para tomar futuras decisiones.
COYUNTURA ECONÓMICA
Taiwán es considerada como una de las economías más estables y desarrolladas de su región, ocupando en el 2009 el puesto Nº 20 en el ranking mundial por PIB, siendo el quinto país de la región tras Japón, China, Corea del Sur e Indonesia (datos del FMI). En el ranking de PIB per cápita en términos de paridad del poder adquisitivo ocupó el puesto 47 a nivel mundial y el cuarto en la región detrás de Singapur, Hong Kong y Japón. Sin embargo, si tenemos en cuenta la tasa de crecimiento del PIB real, Taiwán junto a Japón, Tailandia y Hong Kong ha sido uno de los países de la región más afectados por la crisis económica.
El país, tras pasar los peores momentos de la crisis durante el primer semestre del año 2009, su economía ha mostrado en los dos últimos trimestres del presente año signos de recuperación. El Plan Nacional de Desarrollo para 2010 fijó como objetivo de crecimiento económico un 4,8%. Según Euromonitor Internacional, el crecimiento esperado es del 3,7%. Además el Gobierno espera alcanzar un PIB per cápita de Us$ 17.541, una tasa de paro del 4,9% y mantener la inflación por debajo del 1%.
PIB
El PIB de Taiwán en el 2009 se redujo en un 1,04% con respecto al 2008, situándose en Usd$ 392.220 millones. Esta es la tasa de crecimiento más baja de la isla desde la crisis de 2001. Hay que destacar que durante los primeros cuatro meses de 2010, la economía taiwanesa está mostrando un ritmo de recuperación de la crisis económica y financiera global reseñable, alcanzando una tasa de crecimiento del PIB real del 4,72%.
PRECIOS Y TIPOS DE INTERÉS
Taiwán ha mantenido una tasa de inflación y unos tipos de interés tradicionalmente bajos, lo que evidencia unas bases económicas sólidas. Al cierre del 2009 el tipo de interés se situó en el 1,25%, por debajo del 2% con el que se cerró 2008. La inflación, por su parte, se situó en el 0,87% con signo negativo de media anual, a finales de año redujo su caída hasta el 0,25% todavía con signo negativo. Durante los primeros cuatro meses de 2010 la agencia de estadísticas – Directorate General of Budget, Accounting and Statistics– ha publicado un crecimiento del índice de precios de 1,29%.
DESEMPLEO
Taiwán contaba a finales de 2009 con una tasa de actividad de 58,11% y una tasa de desempleo de 5,74%, lo que significa unos 632.196 desempleados. La tasa media anual de desempleo en 2009 fue algo superior, un 5,85%, también superior al 4,14% que se registró en 2008. Desde principios de 2010 la situación apenas ha cambiado siendo la tasa de desempleo del 5,76% en el mes de febrero.
DISTRIBUCIÓN DE LA RENTA
El nivel de renta per cápita en Taiwán ha visto frenado en 2009 su tendencia ascendiente de los últimos años siendo igual a Us$ 16.997 a final de año, según el Directorate General of Budget, Accounting and Statistics (DGBAS). No obstante, si se tiene en cuenta la Paridad del Poder Adquisitivo (PPA), el PIB per capita de Taiwán ascendería a los Us$ 29.829 según estimaciones del FMI.
SECTORES ECONÓMICOS
- a. Productos agrícolas
Los principales productos cultivados en Taiwán son el arroz (del que es autosuficiente), la caña de azúcar, frutas y hortalizas. Las características orográficas de Taiwán hacen que la superficie cultivable de la isla sea tan sólo el 22,8% del total. Así, la mayoría de las explotaciones agrícolas son inferiores a una hectárea. Con limitada tierra cultivable, Taiwán depende de las importaciones para satisfacer la demanda de muchos productos agrícolas. Tras la transición a una economía industrial en los años sesenta, la participación del sector primario en el PIB se fue reduciendo paulatinamente. De este modo, Taiwán pasó de ser un exportador neto de productos agrícolas a registrar déficit comercial en el sector desde 1974.
- b. Bienes industriales
Taiwán afronta una creciente competencia industrial por parte de países con costes laborales y productivos muy bajos, como China Continental y los países del sudeste asiático. La consecuencia de ello es que el sector secundario ha reducido su participación en el PIB desde el 39,3% en 1993 hasta el 29,97% en 2009. Durante décadas, la industria taiwanesa estaba basada en la tecnología baja y media. En los últimos años, Taiwán se ha esforzado para evolucionar su tejido industrial hacia sectores más intensivos en tecnología. En este sentido, la administración taiwanesa ha trabajado para incentivar el I+D en sectores que actúan de arrastre sobre otros, destacando, sobre todo, la industria electrónica y la de los semiconductores. En esta política, el Gobierno de Taiwán se ha servido de dos pilares: de la creación de instituciones que ayudan a las empresas en el desarrollo tecnológico (como el Industrial Technology Research Institute); y la creación de parques científicos y tecnológicos.
- c. Bienes de consumo
Desde principios de los ochenta, los bienes de consumo están perdiendo peso en la producción industrial del país en favor de productos más intensivos en tecnología. En 1980, aproximadamente el 40% de la producción industrial del país correspondía a bienes de consumo, y tan sólo el 12% correspondía a las industrias tecnológicas. En la actualidad, mientras que los bienes de consumo representan el 10% de la producción industrial total, las tecnológicas significan un 33%.
- d. Servicios
El sector terciario ha incrementado progresivamente su participación en el PIB desde el 57% en 1993 hasta el 68,5% en 2009, pero todavía hay margen para seguir creciendo. El desarrollo de este sector va a ser fundamental para aumentar la competitividad de la economía taiwanesa y compensar los efectos de la deslocalización industrial. Destacan los sectores financieros (banca y seguro) y turismo.
COMERCIO EXTERIOR
Durante las últimas décadas, el comercio exterior y, más concretamente, las exportaciones han jugado un papel fundamental en la economía de Taiwán. Durante los años 70 y los 80, el comercio exterior permitió a Taiwán acumular una gran cantidad de reservas de divisas, siendo en la actualidad el tercer país con más reservas de divisas del mundo. A principios de los 90, Taiwán inauguró un programa de apertura de su economía a los productos extranjeros a través de una reducción en los aranceles que gravaban estos productos, proceso que se ha visto acelerado por la entrada en la OMC, lo cual derivó en una reducción del superávit.
En la actualidad, el principal destino de las exportaciones taiwanesas es China Continental. Hasta el año 2003 lo era Hong Kong, con la particularidad de que una gran parte de las exportaciones con este destino iban dirigidas a China Continental. Hong Kong se mantiene como segundo destino, seguido de Estados Unidos, que es seguido bastante de lejos por Japón y, ya con un menor volumen, Singapur, Corea del Sur Holanda y Alemania. En los últimos años, Taiwán ha diversificado sus mercados de exportación, de tal forma que, en 1989, la participación de los Estados Unidos era de un 36%, pasando a un 16% en 2004. Así, la dependencia que, tradicionalmente, tenían las exportaciones taiwanesas de la demanda de sus productos por parte de Estados Unidos, continuará disminuyendo a medida que aumentan sus exportaciones a la República Popular China y a los países europeos.
La República Popular China se ha convertido en los últimos años en un socio comercial fundamental para Taiwán. Si en 1996 era el decimocuarto socio, en 2001 se situó como cuarto socio y cuarto destino de exportaciones. En 2004 ha pasado ya a ser el primer destino, desbancando a Hong Kong. Taiwán tiene como principales socios por el lado de las importaciones a Japón, Estados Unidos, China y Corea del Sur. Desde la apertura de la economía taiwanesa el crecimiento de las importaciones en valores absolutos ha sido constante, con la excepción de algunos años debido a la coyuntura internacional. Conforme aumenta el nivel de vida y la occidentalización de la sociedad, se observa un incremento de la demanda de bienes de consumo importados.
RELACIONES DE TAIWAN CON CHINA CONTINENTAL Y EL ACUERDO MARCO
La guerra diplomática entre Taiwán y China continental ha durado más de cinco décadas. La raíz de las dificultades diplomáticas de Taiwán en los últimos años ha sido la tensión a través del Estrecho. Por eso, el actual gobierno de la isla ha dado prioridad a la estabilización de las relaciones con China continental, con el fin de poner fin a la insensible y contraproducente competencia en el frente diplomático y encontrar el espacio internacional respectivo, que se base en el respeto mutuo.
Al momento de escribir este artículo, en los próximos días se prepararía una reunión entre ambos países en aras de acordar una próxima ronda de conversaciones entre ambas partes. Se espera que ambos países acuerden la fecha y el lugar para la quinta ronda de conversaciones y finalicen los preparativos al respecto, de tal manera preparar terreno para la firma del Acuerdo Marco de Cooperación Económica (similar a un tratado de libre comercio y que podría marcar un cambio sin precedentes en las relaciones entre los dos territorios), así como un convenio destinado a facilitar la cooperación a través del estrecho en lo que se refiere a la protección de los derechos de propiedad intelectual.
A pesar de la firma de dicho Acuerdo próximamente, ya el volumen del intercambio comercial anual entre ambos países superó ya los Usd$ 100.000 millones. A pesar de ello, no existe ningún mecanismo institucionalizado que regularice los intercambios a tan gran escala. Esa sistematización que llevará a cabo el acuerdo es un paso inevitable para reforzar los vínculos que unen a las respectivas economías y dotarlos de estabilidad y garantías.
La firma del Acuerdo tendrá consecuencias en el mapa estratégico del Este asiático y en el fortalecimiento de la influencia de China en la región. Tanto Japón como Corea del Sur buscarán vínculos más estrechos con China, convirtiéndola de facto en el país líder de la zona. No obstante, también sentará las bases de una paz más profunda y de mayor alcance ya que afianzando los intereses mutuos alejará un poco más la probabilidad de que estalle una guerra en el Estrecho.
Los desarrollos entre ambos países han generado reacciones positivas entre algunas personalidades internacionales, porque favorecen los intereses y expectativas de la comunidad internacional de alcanzar la paz y estabilidad en el Este Asiático. Muchos creen que todo esto será un gran incentivo para los inversionistas extranjeros. Los especialistas estadounidenses piensan que esta renovación de los diálogos entre Taiwán y China continental puede ayudar a iniciar la formación de una base estable y pacífica para Taiwán, China continental y Estados Unidos.